Si estás pensando en convertirte en inversor de un negocio ajeno, tendrás que tener en cuenta las ventajas y novedades que ha traído la nueva reforma fiscal implantada a principios de año.

A la hora de invertir una parte de nuestros ahorros en otros negocios, es muy importante tener en cuenta la normativa fiscal para cumplirla de forma correcta, pero también para aprovecharnos de algunas ventajas y beneficios que nos puede proporcionar según el caso. Por ello, es muy importante que nos dejemos asesorar por expertos en la materia. En Morante Asesores nos dedicamos a la asesoría fiscal desde hace más de veinte años, por lo que siempre estamos al tanto de las novedades y últimas noticias.

Si estás pensando en convertirte en inversor, contacta con nosotros y te aconsejaremos la mejor manera de sacar partido a tu dinero.

La reforma fiscal incluye una rebaja en los tipos impositivos aplicables a las plusvalías y los rendimientos del ahorro, por lo que esta es una de las ventajas para inversores. Anteriormente, los tipos variaban entre el 21% para el primer tramo (hasta 6.000€), el 25% para el segundo tramo (desde 6.000 hasta 24.000€) y el 27% para el último tramo (para cantidades por encima de dicho nivel). A partir de esta reforma, los tipos impositivos cambiarán de forma que el primer tramo irá al 20%, el segundo tramo (desde los 6000 hasta los 50.000€) pasa al 22% y por encima de ese nivel, se le aplica un porcentaje del 24%. En 2016 se volverá a reducir hasta el 19%, 21% y 23%.

Otra de las ventajas para los inversores es que las plusvalías obtenidas a corto plazo dejan de estar gravadas. Con la nueva reforma fiscal, todas las plusvalías tributarán con la tarifa de ahorro, independientemente del periodo de generación de beneficios.

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